Vivimos en una sociedad que carece de conocimientos al
momento de compartir cualquier tipo de información pertinente en las redes
sociales, esta problemática son fenómenos complejos, ya que la falta de conocimiento
va más en parte de la irresponsabilidad y la internet representa el máximo exponente
de la globalización.
Esta polémica hace más énfasis en los usuarios promedios, dígase
adolescentes. Unos de los fenómenos más visto es el sexting, lo cual consiste
en enviar, compartir y/o recibir fotografías, textos, audios cuyo contenido sea
sexual.
Desde mi punto de vista esta problemática se da debido a la irresponsabilidad
en el internet y porque no se tiene un empoderamiento sobre los derechos
sexuales. La seguridad en las redes sociales depende de uno mismo, cada persona
tiene una concepción diferente de lo que es privado y lo que no. Pero en redes
sociales las cosas son diferentes porque cualquier contenido que compartas si
esta en internet ya es público.
Las principales razones de los adolescentes para practicar
sexting es el noviazgo, coqueteo y lucidez, en algunos casos resulta
simplemente divertido, en otros, sirve para coquetear o dar otro contenido a
una relación, sin tomar en cuenta lo negativo de esto y que cada quien abrocha
su propio cinturón de seguridad. No debemos confiarnos de a quien le enviamos
contenidos sexuales o si enviamos algún adjunto lo distorsionemos. Tampoco
debemos confiarnos de donde subimos nuestros contenidos, ya que cualquier
portar, cualquier red social dentro de internet con un solo clic puede pasar de
lo privado a lo público y dar como resultado el cyberbullyng.
Cabe mencionar el Machitroll , que se trata de un cibernauta
que quiere opinar sobre lo que dicen o hacen las mujeres en la red, tomando en
cuenta la violencia sexual cibernética que también va de la mano con el
cyberbullyng ya que al momento de que algún contenido sexting llega a difundirse
usualmente va acompañado de datos de la víctima y esto pone en riesgo la
integridad física y emocional de esa persona.
Tomando en cuenta que existen maneras de evitar que los
contenidos lleguen a ser difundidas, hay aplicaciones que autodestruyen el
mensaje una vez visto, también existen aplicaciones para proteger la privacidad
de los datos. No obstante, el punto mayor es pensar antes de enviar cualquier
contenido y recordar que la seguridad en las redes sociales depende ti.
-Ángela Coral Lag.
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